En los últimos 50 años, las mujeres han comenzado a ser contratadas en un número cada vez mayor a bordo de los buques mercantes y las embarcaciones de pasajeros del mundo. Esta tendencia representa un fenómeno de dimensión creciente, aunque no exento de desafíos.
La Marinería Femenina: Más Allá de la Sal y el Mar

La incorporación de mujeres a la marinería, que en el pasado estaban mayormente presentes como mascarones de proa en los buques transatlánticos, ha evolucionado significativamente. Sin embargo, mientras las mujeres se abren camino a bordo de las grandes embarcaciones de todas las regiones, enfrentan no solo las dificultades habituales de la meteorología, el trabajo duro y las condiciones adversas de navegación, sino también otros obstáculos:
Discriminación: A pesar de los avances, persisten actitudes discriminatorias hacia las mujeres en el ámbito marítimo. Superar estereotipos y prejuicios es un desafío constante.
Acoso Sexual: Las marineras también enfrentan situaciones de acoso sexual. La concienciación y la implementación de políticas de prevención son cruciales.
Escepticismo y Desaprobación: A menudo, las mujeres se ven relegadas a ocupar puestos de baja remuneración con escasas oportunidades de ascenso debido a la desconfianza en sus virtudes y capacidades.

Un Estudio de Referencia de la OIT
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha realizado un estudio titulado “Women Seafarers: Global Employment Policies and Practices” (Marineras: Políticas y Prácticas Globales de Empleo) Este estudio aborda todos los aspectos de la vida de las marineras, desde los derechos laborales hasta los derechos de maternidad. Algunas conclusiones destacadas son:
La discriminación y el acoso sexual son desafíos reales que deben abordarse mediante políticas y sensibilización.
Las mujeres marineras merecen igualdad de oportunidades y reconocimiento por su valioso desempeño a bordo.
A pesar de los obstáculos, la presencia femenina en la marinería es un éxito en sí mismo y debe seguir creciendo.
El día a día de una marinera a bordo de un buque mercante es una mezcla única de rutina, desafíos y camaradería. Aunque cada experiencia puede variar según el tipo de embarcación, la ruta y la posición de la marinera, aquí hay una visión general:
Turnos y Horarios:
Las marineras trabajan en turnos rotativos, generalmente de 4 a 6 horas. Esto significa que están de guardia durante parte del día y la noche.
Los horarios pueden variar según la función de la marinera (por ejemplo, navegación, ingeniería, cocina, etc.).
Tareas Diarias:
Navegación: Las marineras en la cubierta pueden estar involucradas en la navegación, el mantenimiento del equipo, la inspección de la carga y la seguridad del buque.
Ingeniería: Las marineras en el departamento de ingeniería se ocupan del funcionamiento y mantenimiento de los sistemas mecánicos y eléctricos del buque.
Cocina y Servicios: Las marineras en la cocina preparan comidas para la tripulación y se encargan de la limpieza y el servicio.
Condiciones de Vida:
Las marineras comparten camarotes con otras tripulantes. El espacio es limitado y la privacidad es escasa.
La vida a bordo puede ser solitaria, especialmente en viajes largos.
Desafíos:
Clima y Mar: Las condiciones climáticas y del mar pueden ser extremas. Las marineras deben estar preparadas para enfrentar tormentas, olas altas y cambios bruscos de temperatura.
Aislamiento: Estar lejos de la familia y amigos durante semanas o meses puede ser emocionalmente desafiante.
Discriminación y Estereotipos: Algunas marineras aún enfrentan discriminación de género y estereotipos en un entorno predominantemente masculino.
Beneficios:
Experiencia Internacional: Viajar a diferentes puertos y experimentar diversas culturas es una ventaja.
Salario Competitivo: Las marineras suelen recibir salarios competitivos y beneficios adicionales.
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