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La gente de mar se ha visto gravemente afectada por la pandemia de COVID-19. A medida que el mundo se detuvo, continuaron transportando bienes, alimentos y medicinas esenciales por todo el mundo. Pero cientos de miles de marinos han quedado efectivamente atrapados en sus barcos, ya que las restricciones de viaje significaban que no podían regresar a casa y las tripulaciones de socorro no podían unirse a los barcos.
En el último año, se lograron avances significativos para aliviar esta crisis humanitaria, pero las nuevas olas de infección en varias partes del mundo, la aparición de variantes y los desafíos que rodean la vacunación significan que el problema está lejos de terminar.
1. Un año después de la pandemia de COVID-19, ¿cuál es la situación con respecto a los cambios de tripulación?
Estamos viendo algunas mejoras, pero esta sigue siendo una crisis que está afectando a cientos de miles de marinos en todos los continentes. Según el análisis de la industria, el número de marinos varados en barcos que requieren repatriación ha disminuido, de un máximo de alrededor de 400.000 en septiembre de 2020 a unos 200.000 en mayo de 2021. Y no debemos olvidar el número equivalente de marinos que están varados en casa sin paga, incapaces de unirse a los barcos para relevar a estas tripulaciones exhaustas y ganarse la vida. Aunque esta reducción en el número de gente de mar varada es una buena noticia, la situación sigue siendo frágil y el número de gente de mar varada podría volver a aumentar si los gobiernos no toman más medidas. Con nuevas oleadas del virus en algunos países y el aumento de variantes en diferentes partes del mundo, se están imponiendo nuevas restricciones, y esto está afectando significativamente la capacidad para realizar cambios de tripulación. Ésta es la razón por la que la designación de trabajador clave para la gente de mar es tan importante, para permitir que la gente de mar viaje libremente entre sus países de origen y los barcos que son sus lugares de trabajo. Hasta ahora, alrededor de 60 Estados Miembros y Miembros Asociados han respondido a nuestro llamado, e instamos a más países a que sigan su ejemplo porque esa designación sigue siendo vital para resolver la crisis del cambio de tripulación.
2. ¿Está marcando la diferencia?
La vacunación de la gente de mar es un tema muy importante que será fundamental para resolver la crisis del cambio de tripulación. La propia naturaleza del transporte marítimo internacional hace necesario que un número considerable de marinos crucen las fronteras. A menudo tienen que viajar en avión hacia y desde los barcos, ya que sus puertos de salida o llegada pueden estar a miles de kilómetros de sus países de origen. Y aunque esto es contrario a las pautas de la OMS, es posible que se les solicite que presenten una prueba de vacunación contra COVID-19 para poder ingresar en algunos países. La vacunación les permitirá viajar de forma segura y seguir desempeñando su papel fundamental en la cadena de suministro mundial. Debemos tener en cuenta que más del 80% del comercio mundial se transporta por mar. Esos son los alimentos, la energía, los bienes esenciales y los medicamentos, incluidas las vacunas, que son esenciales para todos nosotros. Es por eso que la OMI, junto con otras organizaciones de la ONU, está pidiendo a los gobiernos que den prioridad a la gente de mar en sus programas nacionales de vacunación contra COVID-19, junto con otros trabajadores esenciales. La vacunación de la gente de mar presentará desafíos logísticos, entre otras cosas porque generalmente pasan meses en el mar lejos de sus países de origen, y por eso la cooperación internacional será esencial en esta cuestión.

3. ¿Por qué tantos marinos siguen varados en el mar?
Diferentes países se encuentran en diferentes etapas de la pandemia: mientras algunos están saliendo de los encierros y han vacunado a una proporción significativa de su población, otros se enfrentan a nuevas oleadas de infección y endurecen las restricciones de viaje. La gente de mar a menudo tiene que transitar por varios países, enfrentándose a numerosos requisitos de COVID y cuarentena en el camino. El contexto actual hace que sea complejo y logísticamente desafiante organizar
cambios de tripulación. Cualquier cambio en las restricciones nacionales puede interrumpir los arreglos de viaje desde los barcos hasta el hogar y viceversa. Esto significa que restricciones más estrictas en una parte del mundo pueden generar un efecto dominó y tener un impacto global.
4. ¿Cuáles son los impactos de la crisis en la gente de mar y en el transporte marítimo?
La crisis está obligando a cientos de miles de marinos a seguir trabajando en turnos prolongados, siete días a la semana, mucho más allá del final original de sus contratos y, a menudo, sin un final a la vista. Obviamente, esto está teniendo un gran impacto en su salud física y mental. Desde el comienzo de la pandemia, la gente de mar de todo el mundo ha expresado su agotamiento, fatiga, ansiedad, estrés mental e incluso pensamientos suicidas. Se trata de una crisis humanitaria que también está repercutiendo en la seguridad del transporte marítimo, porque una gente de mar física y mentalmente fatigada tiene un riesgo mucho mayor de verse involucrado en un siniestro marítimo. Además, ha habido varios casos de gente de mar a la que se les ha negado el permiso para desembarcar para recibir atención médica, a pesar de presentar condiciones urgentes como un accidente cerebrovascular. Adicionalmente,
5. ¿Qué ha hecho la OMI para ayudar a resolver la crisis y cuáles fueron los resultados?
La OMI ha establecido el Equipo de acción en caso de crisis de la gente de mar (SCAT), que ayuda directamente a los marinos individuales en situaciones de especial urgencia. Este equipo dedicado ha estado trabajando las 24 horas del día, llevando casos a la atención de gobiernos nacionales, ONG, sindicatos o asociaciones relevantes, aplicando presión diplomática cuando fue apropiado y orientando a la gente de mar hacia la organización adecuada. La SCAT también está trabajando en estrecha colaboración con otras organizaciones, incluida la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la Federación Internacional de Trabajadores del Transporte (ITF) y la Cámara Naviera Internacional (ICS). Nuestros esfuerzos colectivos han ayudado directamente a cientos de marinos varados a regresar a sus hogares y tener acceso a atención médica urgente. En segundo lugar, Los representantes de la OMI han celebrado reuniones bilaterales de alto nivel para alentar a los Estados a designar a la gente de mar como trabajadores clave, reconociendo que son los gobiernos quienes tienen el poder de levantar las restricciones de viaje para la gente de mar. La Organización también ha adoptado una serie de resoluciones y protocolos respaldados que describen pasos claros sobre cómo permitir cambios de tripulación de manera segura. Por último, las campañas de la OMI en los medios de comunicación han destacado las voces de la gente de mar, han puesto el foco de atención mundial en la crisis del cambio de tripulación y han demostrado la importancia de la gente de mar para la economía mundial.
6. ¿Cuáles son las principales lecciones del año pasado?
La lección más importante para todos nosotros es reconocer la importancia de la gente de mar para la vida diaria de las personas de todo el mundo. Son un millón de hombres y mujeres, que eran casi invisibles antes de esta crisis, pero juegan un papel clave al transportar el 80% del comercio mundial. Esta es la razón por la que la gente de mar está en el centro de nuestro tema marítimo mundial para 2021: “La gente de mar en el centro del futuro del transporte marítimo”. Esta crisis también ha puesto de relieve la importancia de la colaboración entre todas las partes interesadas. Mis colegas y yo hemos participado en reuniones semanales con representantes de la industria, sindicatos y otras organizaciones, para monitorear la situación y encontrar soluciones comunes, como los protocolos de la industria para cambios de tripulación seguros. La cooperación en el sector marítimo para organizar los cambios de tripulación ha sido notable,
Los derechos de la gente de mar en el derecho internacional
El Convenio sobre el trabajo marítimo (MLC) de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) estipula que la gente de mar tiene derecho a ser repatriada al finalizar sus contratos. Los Estados del pabellón y los Estados del puerto tienen la responsabilidad de cumplir este derecho. Según el MLC, el período máximo continuo que un marino debe cumplir a bordo de un buque sin licencia es de 11 meses. El MLC y el Convenio STCW de la OMI regulan las horas de trabajo y descanso. Los derechos de la gente de mar a la licencia en tierra y el acceso a la atención médica en tierra también están protegidos por el derecho internacional.
SCAT: un equipo dedicado que apoya a la gente de mar
El Equipo de Acción de Crisis de la Gente de Mar de la OMI se formó rápidamente en respuesta a la crisis del cambio de tripulación. El año pasado, este pequeño equipo de funcionarios de la OMI recibió cientos de mensajes de gente de mar desesperada por volver a casa. Su mandato incluye llevar casos particularmente urgentes a la atención de las autoridades locales, sindicatos y asociaciones pertinentes; aplicar presión diplomática cuando sea apropiado; y abogar por soluciones a la crisis del cambio de tripulación. Hasta ahora, su rápida acción, en colaboración con otras agencias de la ONU, sindicatos y la industria, ha ayudado a cientos de marinos a regresar a sus hogares o acceder a tratamiento médico urgente.
El Convenio sobre el trabajo marítimo (MLC) La OMI ha celebrado una serie de seminarios web regionales de la Organización Internacional del Trabajo para abordar los desafíos que enfrenta (OIT) estipula que la gente de mar tiene una gente de mar durante la pandemia de COVID-19: derecho a ser repatriado al final de sus contratos • América Latina (marzo de 2021). Tanto los Estados del pabellón como los Estados rectores del puerto tienen una responsabilidad con respecto a este • Estado árabe y derecho mediterráneo. Según el MLC, el período continuo máximo (diciembre de 2020) que un marino debe: • África occidental y central prestar servicio a bordo de un buque sin licencia es (noviembre de 2020) 11 meses. El Convenio STCW del MLC y de la OMI • Asia Occidental y Europa Oriental regulan las horas de trabajo y el descanso (noviembre de 2020). Los derechos de la gente de mar a la licencia en tierra y el acceso a la atención médica en tierra • Asia (noviembre de 2020) también están protegidos por el derecho internacional. • África oriental y meridional (octubre de 2020) Los eventos virtuales identifican las mejores prácticas, que abarcan temas como la orientación médica, el desembarco de la gente de mar para recibir atención médica, la vacunación, la digitalización, la salud mental y los efectos del COVID-19 en los cambios de tripulación y la repatriación. Los participantes incluyeron a Estados miembros de la OMI, representantes de sectores y agencias gubernamentales, como autoridades portuarias, aduanas, inmigración, ministerios de salud, relaciones exteriores y aviación, y otros involucrados en el cambio de tripulación, la repatriación y cuestiones clave relacionadas
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